En el chequeo de salud masculino, exámenes de sangre rutinarios (como perfil lipídico y glucosa en ayunas), evaluación de la función tiroidea, renal, hepática y cardíaca, además de PSA y examen rectal son algunos de los más importantes para mantener la salud del hombre al día. ¡Aprende más!
Desafortunadamente, muchos hombres dejan de realizar chequeos de salud periódicos por cuenta propia. Los chequeos regulares son fundamentales para todos y deben ser parte de la rutina de salud masculina.
Según investigaciones de la Sociedad Brasileña de Urología (SBU), aunque el cáncer de próstata es temido por el 58% de los hombres en relación a las enfermedades urológicas, seguido de un 37% que teme la impotencia sexual, el 48% de los hombres mayores de 40 años solo buscan un médico cuando presentan síntomas, y el 58% solo utilizando el sistema de salud público.
La realización de exámenes de rutina es una oportunidad para la detección precoz y prevención de numerosas enfermedades y condiciones médicas. En situaciones críticas, la identificación precoz de ciertas condiciones puede incluso salvar vidas.
Estos exámenes tienen como objetivo evaluar aspectos importantes de la salud como la presión arterial, los niveles de colesterol, glucosa en sangre, función renal y hepática, entre otros.
Además, pruebas específicas, como el PSA (Antígeno Prostático Específico) para el cáncer de próstata, deben realizarse según indicación médica. Detectar precozmente esta condición aumenta significativamente las posibilidades de éxito en el tratamiento.
Los resultados de los chequeos también ofrecen información valiosa sobre el estado general de salud del individuo.
Basados en ellos, se pueden adoptar medidas preventivas, incluyendo cambios en el estilo de vida, como dieta y ejercicio, así como la implementación de medicamentos o tratamientos específicos cuando sea necesario.
Sigue el contenido de hoy y aprende todo sobre los principales exámenes del chequeo de salud masculino.
¿Para qué sirve el chequeo de salud masculino y cuáles son los principales beneficios?
El chequeo de salud para hombres sirve para monitorear y evaluar diversos aspectos de la salud, desde la prevención hasta la detección precoz de enfermedades y condiciones médicas, lo que posibilita un tratamiento más eficaz y aumenta las posibilidades de recuperación.
En general, los chequeos regulares ofrecen una serie de beneficios importantes para la salud de los hombres.
Además de evaluar la condición de salud general, incluyendo la función renal, hepática, los niveles de colesterol, glucosa en sangre y la presencia de posibles infecciones, también puede ser efectivo en el monitoreo de condiciones crónicas, como diabetes, hipertensión o enfermedades cardíacas.
Por último, también proporcionan más educación: durante los exámenes de rutina, los profesionales de salud brindan información y orientación sobre hábitos saludables, prevención de enfermedades y cuidados específicos para la salud masculina.
¿Desde qué edad se debe realizar el chequeo?
La edad adecuada para el chequeo de salud masculino puede variar dependiendo de factores como el historial médico personal, historial familiar de enfermedades, estilo de vida y recomendaciones médicas específicas.
Sin embargo, generalmente se recomienda que los hombres comiencen a realizar exámenes de rutina anuales, especialmente a partir de los 30 años. Más abajo, veremos cuáles son los principales para cada grupo de edad (30, 40 y 50 años).
Es importante discutir, en una evaluación médica, cuándo iniciar su rutina regular de exámenes y cuáles son más apropiados para su edad e historial personal.
Principales exámenes y pruebas realizadas por edad
La recomendación específica de exámenes de rutina puede variar dependiendo de factores como el historial médico personal, historial familiar de enfermedades, estilo de vida y orientaciones médicas específicas. Sin embargo, generalmente, los hombres deben considerar los siguientes exámenes de rutina en diferentes grupos de edad.
Algunas recomendaciones médicas se hacen a los 30, a los 40 y a los 50 años, especialmente cuando existen historiales de salud. Sigue abajo y consulta una lista de exámenes de sangre para el chequeo de salud masculino.
Principales exámenes a los 30 años
- Evaluación de la presión arterial;
- Examen de sangre para verificar los niveles de colesterol total, HDL (colesterol “bueno”), LDL (colesterol “malo”) y triglicéridos;
- Examen de sangre como glucosa en ayunas para la evaluación del riesgo de diabetes;
- Exámenes de sangre para verificar la función renal y hepática;
- Examen clínico para evaluar la salud general y discutir hábitos de vida saludables;
- Exámenes de orina y heces para evaluación periódica y/o cuando sea necesario.
A los 40 años
Además de los exámenes rutinarios (mencionados arriba) como sangre, orina y evaluación de la presión arterial, algunos más específicos pueden ser solicitados a los 40 años. Aprende cuáles:
- En algunos casos, puede ser solicitado el examen de Antígeno Prostático Específico (PSA) y examen rectal para el cribado del cáncer de próstata, especialmente cuando también existe un historial familiar en este grupo de edad;
- Evaluación de la función tiroidea, especialmente si hay síntomas de hipotiroidismo o historial familiar de enfermedades de la tiroides;
- En determinados casos también es posible que sea solicitada la evaluación hormonal, como de la testosterona, por ejemplo.
- Evaluación de la salud cardiovascular, incluyendo electrocardiograma (ECG) y otros exámenes según factores de riesgo individuales, como historial familiar de enfermedades cardíacas o tabaquismo.
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A los 50 años
Ya a partir de los 50 años, los médicos a menudo consideran:
- Colonoscopia para el cribado de cáncer colorrectal, especialmente si no se ha realizado anteriormente;
- Prueba de densidad mineral ósea para evaluar la salud ósea y el riesgo de osteoporosis, especialmente en hombres con factores de riesgo;
- Evaluación adicional de la salud cardiovascular, incluyendo pruebas más detalladas de la función cardíaca y vascular, según sea necesario.
¿Cuál es la diferencia entre un chequeo general y uno completo?
Cuando hablamos de un chequeo general y un chequeo completo, vemos muchas similitudes, pero existen algunas distinciones importantes.
Un chequeo general es típicamente una evaluación básica de la salud, que a menudo involucra exámenes de rutina, como verificación de la presión arterial, peso, altura y tal vez análisis de sangre básicos, como perfil lipídico (colesterol) y glucosa.
Mientras tanto, un chequeo completo es una evaluación más amplia y detallada de la salud, generalmente realizada de forma más espaciada, dependiendo de las necesidades individuales y de las recomendaciones médicas.
Incluye una amplia gama de exámenes y evaluaciones, que pueden abarcar aspectos como salud cardiovascular, función renal y hepática, niveles hormonales, salud sexual, salud mental, salud ósea, evaluación de la función pulmonar, entre otros.
Puede involucrar también exámenes de imagen, como ecografía, tomografía computarizada o resonancia magnética, dependiendo de las necesidades y síntomas del paciente.
El objetivo es realizar una evaluación más completa de la salud del paciente, identificando potenciales problemas, incluso si no existen síntomas, o proporcionando una visión más amplia del estado de salud del paciente cuando, por ejemplo, ya existe una condición de salud conocida.
¿Con qué frecuencia el hombre debe realizar chequeos?
La frecuencia recomendada para los chequeos médicos puede variar dependiendo de varios factores, como:
- Edad;
- historial médico personal;
- historial familiar de enfermedades;
- estilo de vida;
- condiciones de salud específicas.
Para adultos jóvenes saludables, entre 18 y 39 años, sin condiciones médicas crónicas, se recomienda un chequeo general entre 1 y 3 años.
Para adultos de mediana edad (es decir, entre 40 y 50 años), se aconseja realizar chequeos más frecuentes, generalmente anualmente o cada dos años, especialmente para monitorear la salud cardiovascular, la función de la próstata (incluyendo exámenes de PSA) y otros aspectos de la salud que pueden ser más relevantes con la edad.
En el caso de los adultos mayores (a partir de los 65 años) los chequeos deben realizarse incluso antes de un año, dependiendo del caso.
Es importante decir que la frecuencia de los chequeos puede variar caso por caso, y que la evaluación de salud de cada paciente es individual.
¿Los exámenes de chequeo deben realizarse incluso si el hombre se siente saludable?
Sí. Independientemente de la edad, es fundamental que los hombres mantengan un diálogo abierto con sus médicos para determinar la frecuencia adecuada de los chequeos y cuáles exámenes son más apropiados para su edad y/o condición de salud específica.
Cómo mantener la salud siempre al día
En cualquier situación y edad, algunos hábitos son nocivos para la salud masculina.
Evitarlos y adoptar prácticas, como ejercicios físicos y buena alimentación, además de la realización de exámenes médicos regulares para cuidados de rutina es fundamental. En el día a día, es importante:
- Mantener una rutina de ejercicios físicos regularmente;
- Alimentación equilibrada, rica en frutas, verduras, granos integrales, proteínas magras y grasas saludables;
- Evitar el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol;
- Practicar técnicas de manejo del estrés, como meditación, yoga y terapia;
- Mantener una buena calidad del sueño;
- Realizar chequeos médicos regularmente.
No esperes hasta estar enfermo para visitar al médico. Someterse regularmente a chequeos médicos no solo promueve una vida más saludable y larga, sino que también es educativo, empoderándote para tomar el control de tu propia salud.
La rutina regular de exámenes no solo previene complicaciones futuras, sino que también garantiza una mejor calidad de vida, llena de salud física, mental y de felicidad.
Es importante destacar que, cuando existen factores de riesgo conocidos, como historial familiar de ciertas enfermedades, tabaquismo, obesidad o sobrepeso, prediabetes o condiciones médicas preexistentes, los chequeos pueden comenzar aún más temprano.
Cada caso debe ser evaluado individualmente. Por eso, no dejes de consultar al médico sobre cuál es el mejor camino para ti.
Si estás en la franja de los 40 años y tienes historial familiar o ya has pasado de los 50 y necesitas iniciar tu rutina urológica para la prevención del cáncer de próstata, no dejes de consultar nuestro equipo para más información.
