El tratamiento con ondas de choque para la enfermedad de Peyronie se indica principalmente en la fase inicial de la enfermedad; puede ayudar a aliviar el dolor e intentar estabilizar la curvatura peneana, según la evaluación médica. La evaluación médica es fundamental para garantizar seguridad y eficacia.
La curvatura peneana es el principal síntoma de la enfermedad de Peyronie, una afección adquirida a lo largo de la vida que puede generar preocupación por la apariencia y la funcionalidad del pene.
Los casos más graves requieren cirugía, pero la identificación precoz de la enfermedad de Peyronie permite considerar enfoques menos invasivos, dependiendo de la evaluación médica — momento en el que tratamientos como las ondas de choque pueden ser estudiados.
A continuación, entenderá cuándo la terapia de ondas de choque puede ser más viable que la cirugía. Siga leyendo y descubra si esa es la opción ideal para su caso.
¿Cómo funcionan las ondas de choque para la enfermedad de Peyronie?
El tratamiento con ondas de choque para la enfermedad de Peyronie puede ayudar, en algunos casos, a estabilizar la curvatura peneana y mejorar la calidad de la erección.
La técnica funciona como un mecanismo de tracción, aplicado con el pene flácido, y puede, en algunos casos, utilizarse con el objetivo de ayudar en el manejo de los síntomas asociados a la enfermedad de Peyronie, siempre bajo orientación médica. Entre estos síntomas se destacan:
- Dolor durante la erección;
- Pérdida de longitud peneana;
- Progresión de las placas fibrosas en el interior del pene;
- Disfunción eréctil asociada a la curvatura.
¿Cuándo se indica la terapia de ondas de choque?
El tratamiento con ondas de choque para la curvatura peneana se indica solo en la fase inicial de la enfermedad de Peyronie —también llamada fase inflamatoria—, cuando la fibrosis aún no ha cicatrizado.
Sin embargo, es importante que un urólogo evalúe el cuadro de manera individual, ya que el uso indiscriminado puede empeorar la curvatura.
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Resultados clínicos de las ondas de choque en el pene
De acuerdo con una revisión sistemática publicada en el Journal of Sexual Medicine en 2019, que analizó múltiples estudios, el tratamiento con ondas de choque puede aliviar los síntomas de la enfermedad de Peyronie.
Sin embargo, los autores observaron que la técnica no promueve una mejora significativa en la curvatura peneana ni en la función eréctil. Aun así, puede ser útil en casos de dolor persistente, con reducción del dolor en hasta el 64 % de los pacientes.
Beneficios de la terapia de ondas de choque
El tratamiento con ondas de choque para la enfermedad de Peyronie puede indicarse a pacientes con curvatura peneana adquirida, especialmente en la fase inicial o en casos con dolor significativo.
Aunque no se considere un tratamiento definitivo para la curvatura peneana, puede aportar beneficios relevantes en el control de los síntomas, tales como:
- Procedimiento rápido y no invasivo, realizado en consultorio, sin necesidad de hospitalización ni anestesia;
- Puede asociarse a otros tratamientos, como medicamentos o cirugía;
- Reducción del dolor peneano durante la erección, común en la fase aguda de la enfermedad;
- Mejora de la calidad de vida, ayudando al paciente a afrontar mejor el impacto emocional de la condición.
Los efectos secundarios reportados en estudios son leves y transitorios, como dolor local o hematomas, lo que convierte a la terapia de ondas de choque en una opción considerada segura.
Ondas de choque vs. otras opciones de tratamiento
La enfermedad de Peyronie puede tratarse de diferentes formas, con el objetivo de preservar o recuperar la función peneana.
El tratamiento clínico suele indicarse a pacientes que aún mantienen la funcionalidad del pene, es decir, pueden lograr erección y penetración, incluso con el inicio de la formación de placas fibróticas.
En esta fase, el uso de medicamentos antiinflamatorios, dispositivos de tracción peneana y terapias complementarias, como la terapia de ondas de choque, pueden ayudar a estabilizar la progresión de la enfermedad y a reducir síntomas como el dolor.
Estos métodos, sin embargo, no buscan corregir las deformidades, sino evitar el agravamiento del cuadro.
Para evitar la cirugía, la aplicación de colagenasa puede ser una opción de tratamiento no invasivo para la enfermedad de Peyronie, aunque no está disponible en Brasil y presenta resultados limitados en casos de curvaturas severas.
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Cuando la curvatura peneana es severa, el tratamiento quirúrgico se convierte en el enfoque más eficaz. La cirugía con la Técnica Egydio es una opción utilizada para corregir la curvatura peneana y reconstruir el pene, con el objetivo de mejorar la función y la anatomía, según cada caso.
La elección entre el tratamiento clínico y el quirúrgico debe realizarla un urólogo que acompañe al paciente desde los primeros signos de la enfermedad, pues cada caso requiere una evaluación individualizada, considerando las características de la fibrosis y la evolución de los síntomas.
Consulte al Dr. Paulo Egydio y descubra el tratamiento ideal para su caso
La aplicación de ondas de choque para la enfermedad de Peyronie es una alternativa que debe ser cuidadosamente evaluada por un urólogo, pues no siempre es eficaz para todos los casos.
Para entender qué enfoque es más indicado para su cuadro, consulte al Dr. Paulo Egydio, andrólogo y urólogo con más de 25 años de experiencia en el tratamiento de la curvatura peneana.
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